Se cumplen los 42 años del ratón, del PowerPoint, de las ventanas y de otras cositas

Para variar, no estamos hablando del Magic Mouse, ni de Apple. Tal día como hoy, pero hace 42 años, un tal Douglas Engelbart realizaba la que, para muchos científicos, fue la madre de todas las keynote o presentaciones de producto. Fue en el Brooks Hall del Centro de Convenciones de San Francisco, el mismo lugar, curiosamente, donde Apple y otras compañías hacen sus keynotes hoy en día.

Engelbart y otros 19 científicos del Augmentation Research Center, perteneciente al Instituto de investigación de Stanford, presentaron un proyecto de computación denominado NSL ante cerca de 1.000 especialistas de la época.


Esta Keynote primigenia se hizo famosa por ser el marco donde se presentó el primer ratón de la historia, una tosca caja de madera con ruedas cuya esencia, sin embargo, pervive hoy en día inalterada. El ratón de Engelbart eclipsó el resto de ideas de la presentación, sin embargo, allí estaba todo, o casi todo.

El proyecto de Engelbart era una plataforma (casi podríamos decir un sistema operativo) que había sido ideado con el fin de facilitar la interacción de los trabajadores con los ordenadores de la época.

Engelbart no sólo hizo su presentación con el primer pase de diapositivas computerizado de la historia, antecesor absoluto del Powerpoint y otros programas similares. Él y sus ayudantes mostraron conceptos tan populares hoy como el interfaz basado en ventanas, la videoconferencia, los hipervínculos, o la edición de texto y gráficos. Todo ello en una época en la que los ordenadores aún funcionaban con tarjetas microperforadas. El interés de Engelbart no eran complejos usos científicos para los ordenadores, sino cómo estos podían ayudar a las personas normales a trabajar de forma más inteligente, una idea que él denominaba ‘inteligencia aumentada’.

El ratón de Engelbart aún durmió durante años en un cajón antes de que viera su primera aplicación comercial. Otro tanto ha pasado con los demás avances que hoy en día consideramos tan normales. Este Da Vinci Moderno, que hoy tiene 85 años, aún se dedica a la investigación y desde aquí queremos dedicarle este pequeño homenaje.


Texto original en Xataca