1.- Elimina los gráficos cuando no sean necesarios Pensando en los equipos de sobremesa, ya sean computadores de escritorio o portátiles, las ediciones de navegadores desktop como el de Opera permiten desplegar sesiones de navegación con los gráficos en baja resolución. Esta acción puede resultar muy interesante, puesto que permite cargar la página completa en mucho menos tiempo que cuando se cargan las imágenes originales. Para los usuarios habituales de Internet Explorer, es posible desactivar por completo los gráficos. Basta con acceder a “opciones de Internet”, y dentro de la pestaña de “opciones avanzadas”, desmarcar la casilla de “mostrar gráficos”. Es evidente que la velocidad se incrementa, puesto que los gráficos no se cargan, y resulta útil para cuando trabajas con páginas en las que impera el texto. Ni tan siquiera verás el logotipo de Google cuando accedas a la página del buscador. 2.- Desactiva los plug-ins no utilizados Aunque cada na...