LiFi, la tecnología que jubilará al WiFi
WiFi: la tecnología que nos alivió tantos contratiempos desde
hace mucho tiempo, no solo por la comodidad y por poner “al internet en
el aire”, al parecer ya tendría su sucesor.
Se trata de LiFi, acrónimo de Light Fidelity. El
heredero natural de la tecnología WiFi promete dar mucho de qué hablar en
los próximos años. A muy grandes rasgos, se trata de un sistema digital
que traduce el clásico lenguaje binario de los ceros y unos en pulsos
luminosos apagados o encendidos, respectivamente, a través de diminutas
bombillas leds capaces de iluminarse y apagarse millones de veces por
segundo.
El prodigio también bautizado como Comunicación de Luz Visible se encuentra en fase experimental en la Universidad
de Edimburgo por parte de un grupo de investigadores del Instituto
Heinrich Hertz de Berlín, liderado por el físico Harald Haas.
Los pioneros de la transmisión de datos a través de la iluminación aseguran que a través del parpadeo de los leds se pueden crear redes inalámbricas de acceso a Internet con velocidades de transmisión de datos próximas a los 500 megabits por segundo (Mbps). Esas prestaciones vienen a multiplicar por cinco los tránsitos que actualmente ofrecen las líneas de fibra óptica.
Para disfrutar de esta tecnología se requiere un router luminoso (que
se puede adherir de forma barata y sencilla en cualquier bombilla
eléctrica convencional) y que es capaz de emitir la señal binaria. Por
otra parte, los impulsos son captados por cuantos receptores luminosos
se precisen y estén instalados en todo tipo de dispositivos conectados,
desde los ordenadores a tabletas, pasando por los móviles, televisores o
electrodomésticos, por ejemplo.
Los expertos en la materia dejan claro que los impulsos luminosos son
imperceptibles para la vista humana, sin ocasionar daños ni molestias
de ningún tipo. Además, cualquier farola, lámpara o linterna puede
convertirse en un hotspot.
La tecnología viene a ser diez veces más barata que el wifi y también mucho más segura,
ya que al margen de los sistemas de control de acceso y contraseñas,
los pulsos luminosos no pueden atravesar paredes. La luz eléctrica no
molesta ni interfiere en la comunicación, sin ocupar las cotizadas
bandas de frecuencias. Lo dicho, el LiFi puede hacer sombra al wifi.
¿Se animaría a apostar por esta nueva tecnología?