Qué fue del Ultimate Boot CD
Puede que a los más jóvenes esto no les suene de nada, pero seguro que más de un veterano sonreirá al recordarlo y se sorprenderá cuando se de cuenta de que el proyecto sigue vivo. Hablo del Ultimate Boot CD, un conjunto de software que más de uno habrá utilizado para reparar instalaciones de sistemas operativos.
El proyecto, completamente gratuito, cobró vida de la mano de Victor Chew en el año 2003 cuando vio que no podía ejecutar ciertos diagnósticos desde un disco floppy. Eran los años en los que todo el mundo empezaba a grabar discos y a tener torres altísimas de bobinas de CDs y DVDs en sus habitaciones, así que la idea del Ultimate Boot CD presentaba muchísimas ventajas: más velocidad, más espacio y menos peligro de que se dañe el disco con demasiado uso.
Empecemos por el principio, que es por la definición pura y dura: el Ultimate Boot CD era (y sigue siendo) un conjunto de herramientas para realizar pruebas y diagnósticos que se pueden grabar en un Live CD, de modo que al introducirlo en un ordenador basado en arquitectura Intel éste arrancaba con ese CD y no con el sistema operativo que tenía instalado. Fuera Linux, Windows, OS / 2 o cualquier otro compatible. No, no funcionaba en los Mac.
Un ordenador que arranca desde uno de estos Ultimate Boot CDs tiene esta pinta:
El disco se usaba, sobretodo, para poder ejecutar pruebas en un ordenador cuyo sistema operativo estuviese dañado y no arrancase bien, o sencillamente estaba demasiado lleno de virus como para hacerlo sin exponerse a riesgos. En él tenemos herramientas para reparar o redimensionar particiones, comprobar el estado de un disco duro o la memoria, ejecutar programas basados en DOS sin necesidad de arrancar el ordenador, arrancar pruebas de benchmarking, detectar hardware rebelde, recuperar datos de un disco dañado... en definitiva, "salvar" información de un ordenador y reparar todo lo que sea posible sin que tengamos que depender del sistema que hay instalado.
En su época, era una herramienta muy conocida sobretodo entre los técnicos y los responsables del mantenimiento de varios ordenadores tanto. El método para conseguirlo no ha cambiado mucho con el tiempo: nos descargamos una ISO de 598 MB, la grabamos en un CD de modo que podamos arrancar con él, y listo. Esa descarga era antes más difícil por las velocidades de internet, de modo que el Ultimate Boot CD se esparcía más a base de copiar el disco que un amigo ya tenía.
Ahora bien, los tiempos han cambiado. Muchos ordenadores empiezan a prescindir incluso de los lectores de CD, y más de un usuario ya ni se acordará de lo que era grabar un disco óptico. Además hay que tener en cuenta que todo se está moviendo a las plataformas móviles, que tienen sistemas más cerrados pero con posibilidades de recuperación más versátiles. Cuesta relativamente poco, por ejemplo, guardar todos los datos imprescindibles en una nube y restaurar el terminal desde cero.
Pero aún con estas y aunque la web del proyecto no parece que se haya tocado desde hace muchos años, el proyecto del Ultimate Boot CD sigue vivo y ha intentado adaptarse a los días que corren. Podemos, por ejemplo, personalizarlo para poder arrancarlo desde una memoria USB en vez de tener que grabarlo en un CD. Y a lo largo de los años también han ido apareciendo proyectos derivados, como Ultimate Boot CD for Windows o una variación del Ultimate Boot CD original que arranca directamente en una Live Distro de Debian para poder utilizar todas las herramientas de una forma más visual.
Además, y aunque sea con poca frecuencia, el proyecto original sigue actualizándose. las últimas noticias son del pasado mes de mayo, cuando se actualizaron las versiones de algunas de las herramientas del disco y se añadió un gestor de particiones capaz de trabajar a bajo nivel.
No es algo que se esté utilizando tanto como antes ya que ahora hay muchas más formas de solucionar "catástrofes de datos" y muchos más dispositivos además de los ordenadores clásicos, pero desde luego sigue siendo una herramienta para todos los que tengan que salvar información a menudo por trabajo.
Informe: Genbeta
El proyecto, completamente gratuito, cobró vida de la mano de Victor Chew en el año 2003 cuando vio que no podía ejecutar ciertos diagnósticos desde un disco floppy. Eran los años en los que todo el mundo empezaba a grabar discos y a tener torres altísimas de bobinas de CDs y DVDs en sus habitaciones, así que la idea del Ultimate Boot CD presentaba muchísimas ventajas: más velocidad, más espacio y menos peligro de que se dañe el disco con demasiado uso.
Empecemos por el principio, que es por la definición pura y dura: el Ultimate Boot CD era (y sigue siendo) un conjunto de herramientas para realizar pruebas y diagnósticos que se pueden grabar en un Live CD, de modo que al introducirlo en un ordenador basado en arquitectura Intel éste arrancaba con ese CD y no con el sistema operativo que tenía instalado. Fuera Linux, Windows, OS / 2 o cualquier otro compatible. No, no funcionaba en los Mac.
Un ordenador que arranca desde uno de estos Ultimate Boot CDs tiene esta pinta:
El disco se usaba, sobretodo, para poder ejecutar pruebas en un ordenador cuyo sistema operativo estuviese dañado y no arrancase bien, o sencillamente estaba demasiado lleno de virus como para hacerlo sin exponerse a riesgos. En él tenemos herramientas para reparar o redimensionar particiones, comprobar el estado de un disco duro o la memoria, ejecutar programas basados en DOS sin necesidad de arrancar el ordenador, arrancar pruebas de benchmarking, detectar hardware rebelde, recuperar datos de un disco dañado... en definitiva, "salvar" información de un ordenador y reparar todo lo que sea posible sin que tengamos que depender del sistema que hay instalado.
En su época, era una herramienta muy conocida sobretodo entre los técnicos y los responsables del mantenimiento de varios ordenadores tanto. El método para conseguirlo no ha cambiado mucho con el tiempo: nos descargamos una ISO de 598 MB, la grabamos en un CD de modo que podamos arrancar con él, y listo. Esa descarga era antes más difícil por las velocidades de internet, de modo que el Ultimate Boot CD se esparcía más a base de copiar el disco que un amigo ya tenía.
Ahora bien, los tiempos han cambiado. Muchos ordenadores empiezan a prescindir incluso de los lectores de CD, y más de un usuario ya ni se acordará de lo que era grabar un disco óptico. Además hay que tener en cuenta que todo se está moviendo a las plataformas móviles, que tienen sistemas más cerrados pero con posibilidades de recuperación más versátiles. Cuesta relativamente poco, por ejemplo, guardar todos los datos imprescindibles en una nube y restaurar el terminal desde cero.
Pero aún con estas y aunque la web del proyecto no parece que se haya tocado desde hace muchos años, el proyecto del Ultimate Boot CD sigue vivo y ha intentado adaptarse a los días que corren. Podemos, por ejemplo, personalizarlo para poder arrancarlo desde una memoria USB en vez de tener que grabarlo en un CD. Y a lo largo de los años también han ido apareciendo proyectos derivados, como Ultimate Boot CD for Windows o una variación del Ultimate Boot CD original que arranca directamente en una Live Distro de Debian para poder utilizar todas las herramientas de una forma más visual.
Además, y aunque sea con poca frecuencia, el proyecto original sigue actualizándose. las últimas noticias son del pasado mes de mayo, cuando se actualizaron las versiones de algunas de las herramientas del disco y se añadió un gestor de particiones capaz de trabajar a bajo nivel.
No es algo que se esté utilizando tanto como antes ya que ahora hay muchas más formas de solucionar "catástrofes de datos" y muchos más dispositivos además de los ordenadores clásicos, pero desde luego sigue siendo una herramienta para todos los que tengan que salvar información a menudo por trabajo.
Informe: Genbeta